LA FOTO

Hace un par de años tuve la ocasión de entrevistar a los responsables del SAMER. Es algo así como un servicio de asistencia médico exclusivo para los vecinos de Las Rozas. El caso es que el SAMER cuenta con una dotación de perros entrenados especialmente para detectar personas sepultadas en casos de seísmos.

El SAMER se desplazó a Haití con motivo de su desastre humanitario provocado por el terremoto. Uno de los responsables del SAMER me explicó el modus operandi de dicha dotación. A él concretamente le avisaron a las 2 de la mañana para que -cuanto antes- se desplazara a la base de Torrejón donde un avión Hércules le llevaría a la zona devastada. De modo que cuando llegó a Torrejón se tuvo que encontrar con la consiguiente situación: el capitán de la aeronave decía que no podía levantar el vuelo el Hércules porque llevaban 100 kilogramos de exceso de "equipaje". A todo esto, no eran cremas para el sol, ni bañadores para tomar el solete; eran los perros entrenados para buscar personas entre escombros. Como es lógico, a nadie con dos dedos de frente se le escapa que no era más que una excusa para demorar la partida. Os imagináis que en un bus interurbano te dijeran que no puedes entrar con los kleenex por "exceso de equipaje"...Absurdo, verdad. Pero un perro y parte de material se tuvo que quedar en tierra.

Cuando parecía que el Hércules podía ya despegar, informan a los bomberos y personal especialmente entrenado en buscar personas en grandes catástrofes que no podían aún despegar. Ahora ya se sabía el por qué: estaban esperando a que viniera uno de los ministros a hacerse la foto de rigor con todo el personal. De coña, ¡eh! Pues completamente cierto.

Lo triste y penoso del caso es que mientras había gente atrapada entre escombros, una persona le daba más importancia a su ego y a hacerse una foto más para su álbum que en las vidas que se pudieran salvar.

La dotación de España tardó más de 20 horas en llegar a la zona cero. Estados Unidos sólo tardó 3 horas. Para los que piensen que la cercanía jugaba a su favor, no sólo fue eso. Ayudó (y mucho) que EEUU disponga de aviones ya preparados con material de emergencia. Pero, sobre todo, lo que seguro que fue determinante es que no tuvieron que hacerse ninguna foto.

DEL RESCATE AL PILLA PILLA

Aunque nuestros políticos, los que gobiernan, han querido obviar en todo momento el término de marras, 100.000 millones de euros a la banca, si no es un rescate para sanear las cuentas (nunca mejor dicho), díganme qué es. Y ya puestos a jugar a juegos de la infancia, después del rescate, lo suyo sería jugar al pilla pilla (como dice mi hija de 5 años).

De acuerdo que lo último que le queda al españolito de a pie es el recurso al pataleo. Vale que podremos estar informados de manera tangencial. Pero lo que a nadie se le escapa es el mamoneo cachondeo, con todas las letras, que se está viviendo en España. Vemos cómo un sector (el de la banca) ahora está pasando sus apurillos y de manera tímida levanta la mano a ver si con suerte cogen algo del pastel de Bruselas. 5.000 millones para Bankia. No. Mejor, 19.000 millones. Pues van a tener que ser 24.000 millones. Y el resto de banqueros, ya que nos ponemos, pues a poner el cazo. Total: unos 100.000 millones (dentro de poco las cifras serán tan abultadas que no vamos a saber ni pronunciarlas).

Dicen que esto, el No Rescate, al ciudadano de a pie (al españolito) no le va a afectar, porque será como un préstamo que se da a los bancos (pobrecitos ellos...) para que salgan adelante en la crisis, y que hasta van a pagar intereses. No me lo creo. Dicen que gracias a este empujoncillo el crédito volverá a fluir a las PYMES (verdadero motor empresarial en España). Tampoco me lo creo. Dicen, incluso, que van a vigilar qué moñas se hace con este pastizal...Tampoco me lo creo. Y a la vista está que las mega pensiones e indemnizaciones que tenían varios (muchos, demasiados) altos cargos de estos bancos rescatados seguramente las hagan efectivas y ellos se lleven sus súper bonus millonarios. Y dudo mucho que nadie mueva un dedo para evitar tal despropósito.

Mucho se ha hablado estas últimas semanas sobre la imperiosa necesidad de tener que salir a ayudar a estos bancos en crisis... Señores, no nos engañemos: si están en crisis es porque lo han hecho mal, se han equivocado en su estrategia o por lo que sea, que me da igual. Pero, ¿por qué tenemos que salir a ayudarles? ¿Por qué no ayudamos a las PYMES, que ellos sí que son los que nos sacan las castañas del fuego, pagan sus impuestos en España y por lo general ni se atreven ni saben evadir? ¿Por qué no ayudamos al emprendedor, con ideas renovadas, frescas, nuevas? ¿Por qué no desviamos el 50% de esa millonada a I+D+i y hacemos que España pase de vivir del sol y playa y ladrillo a nuevas tecnologías, avances en medicina o lo que surja?

Lo dicho, primero jugamos como colegiales al rescate (de los más "desfavorecidos") y luego ellos jugarán al pilla pilla (a ver quién "pilla" más). Y así nos va a ir.