lunes, 4 de noviembre de 2013

GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO

A día de hoy queda un nutrido grupo de PYMES que ven al responsable de comunicación como un mago, un hechicero, Dios, un chamán o no sé qué. Uno se esmera en explicar en qué consiste mi trabajo (gestionar la comunicación) para que así puedas ser más conocido y tengas más oportunidades de negocio: tanto nuevo como consolidar el que ya tienes; porque recuerda, somos infieles (¿por cuántas compañías de telefonía móvil has pasado en los últimos 3 años?)
Vamos a hacer como con los niños chiquititos: explicando con un dibujo algo muy elemental, y basado en las definiciones de Davenport y Prusak.

Cuando una empresa contrata los servicios de un periodista especializado en una materia concreta se espera que, gracias a su buen hacer (el know how que dicen ahora) unido a su abultada agenda, la reputación de la misma suba enteros, que sea más conocida en su sector, en su industria. Es decir, aprovechar el "tirón", porque ahora "me conocen (más)".


La realidad es que un elevado porcentaje de las empresas no utilizan esos impactos en prensa de manera adecuada, como una herramienta de marketing. Un cliente mío me afirmaba que cada vez que se publicaba algo en su blog, lo iba enseñando a todos sus potenciales clientes, y que siempre había unos cuantos que compraban. ¡Prueba superada!

Volviendo al dibujo de la pirámide, y respecto a la comunicación, cualquier estrategia en este área tiene un fin último: ganar dinero a través de más clientes. Y todo empieza en la base.

Cada vez que se emite una nota de prensa, se escribe un blog, hay una participación activa en las redes sociales, etc. se están generando DATOS; datos muy valiosos -en potencia- porque si no se tratan adecuadamente no sirven de nada. Pero si una empresa recibe unos datos y los analiza concienzudamente, lo más probable es que los convierta en INFORMACIÓN. Es decir, gracias a una nota de prensa o un post en un blog ahora somos más conocidos. El paso posterior sería ir a visitar a nuestros potenciales clientes, enseñarles los impactos en los medios para que sepan quiénes somos, a qué nos dedicamos; intentar generar negocio.
El proceso no acaba en este punto. Con la INFORMACIÓN recibida, lo idóneo será convertir, transformar, ésta en CONOCIMIENTO. Es decir, llegar a un análisis más exhaustivo y alcanzar a comprender -gracias a esas herramientas de comunicación (nota de prensa, blog...)- por qué me han comprado; o mejor: por qué no me han comprado, saber cuáles son mis puntos débiles. No es más que la GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO, gracias a las herramientas de comunicación.

En el día a día he tenido que lidiar con clientes que incluso dándoles el nombre de la empresa y los nombres y apellidos de los gerentes por los que tienen que preguntar para hacer negocio, no lo han hecho, desperdiciando una oportunidad de negocio, de hacer dinero. Eso sí, en algún momento te dicen que " no ven claro el gasto (inversión, señores, se dice inversión...) en comunicación.

Haz un análisis de tu situación empresarial. Investiga sinceramente si tu empresa analiza los datos que recibe, y el tratamiento que hace con ellos. En un elevado porcentaje supone la diferencia entre la quiebra y el éxito.