viernes, 30 de marzo de 2012

EL NIÑO MELÓN

No lo voy a negar. El momento en que el actor Guillermo Toledo en la comedia El otro lado de la cama aparece en el teatro de lesbianas y sale gritando lo de "soy un niño melón", me hizo gracia.

Pero este niño melón en los últimos años ha dado un giro difícil de reconocer. De ser un actor..."del montón", (tampoco hay que pasarse), ha pasado entre otras cosas a: cambiar su nombre por su homólogo en inglés (clara renuncia a la lengua española); dar el cante en el Congreso de los Diputados. Y ayer, con motivo de la huelga general, optar por liderar un piquete informativo y cuya actividad principal se centró en destrozar un bar.

A mí lo que me deja la duda es qué tiene que ver un piquete informativo con que te jodan  destrocen tu negocio. Me imagino la escena: tú estás ejerciendo tu derecho al trabajo y acuden una serie de ¿personas? obligándote por la fuerza a que cierres. Por si acaso no te has enterado, te explican amablemente que "eres un mierda; o cierras o te vas a enterar" ¿Esto se llama coacción, no? Claro, el dueño del bar opta por lo más prudente, cierra y va a poner la correspondiente denuncia.
El resultado ha sido la detención del ¿actor? tras pasar noche en los calabozos. A Dios gracias, no todos los actores de izquierdas ni piensan ni actúan como él. Me gustaría imaginarme a Guillermo Toledo acudiendo al Ministerio de Cultura, agarrando por la solapa al ministro de turno y chillándole que es un mierda, y que como no le den la subvención para la súper producción se va a enterar, mientras quema el mobiliario del despacho.

Lo único que le puede salvar a este sujeto son unas declaraciones que realizó en su "folleto" Público, y en un acto de sinceridad afirmaba: "Creo que no me he adaptado a la sociedad".  Sí Guillermo, miles de personas piensan que, efectivamente, no te has adaptado a la sociedad. Quizás una temporada en la sierra de Madrid, en Soto del Real, con ese aire tan puro, te haría mucho bien para evitar comportamientos como el del 29-M.

jueves, 29 de marzo de 2012

LA LEY DEL SILENCIO

Ayer estaba leyendo el blog de Enrique Dans. Una empresa le ha denunciado presuntamente por un delito contra el honor. Mientras no se demuestre lo contrario, la presunción de inocencia se aplica a todos por igual. Pero lo sustancial en la noticia, para mí, es que huele un poco más a un "cállate" que a una falta real en el honor de la empresa.

Y en realidad, cuando leí el post de Enrique me vino a la memoria algo que me sucedió hace ya unos cuantos años, concretamente en 2005. Yo estaba recién operado de una hernia discal y al segundo día de estar en casa con las molestias propias recibí una llamada de la Guardia Civil de Las Rozas. Para más coña inri, encima pensé que era un amigo mío muy coñón. De hecho le mandé a tomar por donde amargan los pepinos. Pero el guardia civil, con infinita paciencia, me instó a que me pasase lo antes posible por las comandancias de dicha localidad. Tuve que esperar a que llegara mi mujer puesto que no podía conducir.

Por teléfono no me dijeron de qué se trataba de modo que la intriga aumentó hasta que llegué al "cuartelillo". Me llevaron a una habitación y al ratito llegó un guardia civil, me preguntó si yo era santi (un apodo con el que escribía en un foro local). Al contestar afirmativamente me explicaron que una empresa  de la zona me había denunciado por un mensaje que había escrito en un foro. Yo me quedé perplejo porque -¡puñetas!- había dicho la verdad y había argumentado en dicho post las razones por las que yo no contrataría sus servicios.

A día de hoy creo que me llamaron simplemente para que pudiera ejercer mi derecho de réplica, porque actualmente el 99% de las compras se hacen influenciadas por lo que uno lee en los foros. Y hay opiniones favorables y otras que..en fin. Que mi mensaje en el foro hubiera podido ser contraproducente a la actividad de su empresa, quizás; que sólo expresé mi opinión en base al trabajo realizado para el cual fue contratado, también. Y que muchas de estas demandas/denuncias tienen su origen en buscar un silencio en la otra parte, casi siempre. Lo malo (o bueno) es que lejos de conseguir dicho silencio, el clamor popular suele aumentar.

DIARIO DE UN PADRE UN DÍA CUALQUIERA

Hoy a las 7:20 me he despertado antes incluso de que sonara el despertador. Mi hija de 4 años ha decidido dormir en mi cama y como ya no quería dormir más, me ha pedido el desayuno. Me he levantado a dárselo, he desayunado con ella. Luego, mientras me duchaba, mi hijo de 2 años ha empezado a llorar. He tenido que batir mi propio récord en asearme para ir a atenderle. En cero coma me he vestido y -cuando estaba atendiéndole- mi hija me pedía que la ayudara a vestirse. Con uno colgado en el cuello he tenido que hacer malabares para vestir a la niña. Cuando he terminado de esta tarea he ido a recoger los desayunos y poner un lavavajillas. Después he ido a poner el desayuno al pequeño, pero la mayor me grita desde el cuarto de baño para que la limpie el "culete". Cuando llego a la cocina, el pequeño se ha tirado todo el desayuno encima. Vuelta a empezar. Son ya las 8:30 y aunque el colegio está a tan sólo 2 kilómetros (y vamos en coche), seguro probablemente llegaremos tarde. Después de limpiar convenientemente al muchacho, meter en una mochila mi tartera con comida y recoger el portátil del trabajo, tengo que arrastrarles hasta el ascensor porque no quieren ir al colegio y quieren ver La Casa de Mickey Mouse (qué listos; y a mí me gustaría quedarme en la terraza tomando el sol). La espalda la tengo a punto de caramelo de sudor (y sólo estamos en marzo).
 
Llegamos a un parking cerca del cole. Bajo a la mayor y el pequeño me dice que tururú, que le coja en brazos que él está de huelga de piernas y que no quiere andar. De modo que me tengo que echar a mi espalda su mochila, en una mano el paquete de pañales y, colgado del brazo, al niño. Con la otra mano tengo que llevar a la mayor. El colegio está en una pequeña cuesta y cierran las puertas a las 9:10. Me quedan 2 minutos escasos para hacer los 200 metros con todo el lastre que llevo. La frente la llevo más empapada que Contador subiendo el Tourmalet y la espalda...estoy por pedirle a mi jefe que instale una ducha portátil para refrescarme cuando llego al trabajo.
 
He conseguido dejarles on time. Ahora viene la segunda parte: mi trabajo (por el que me pagan, vamos). Tengo que hacer 13 kilómetros en el mínimo tiempo para llegar a una hora decente. De momento no me han puesto una multa, aunque eso es lo que menos me importa, mientras no tenga un accidente. Después de una jornada laboral intensa, toca recoger a los niños. Salen a las 5 menos 10 de la tarde y tengo que calcular el tiempo para salir de mi oficina, llegar al coche, deshacer los 13 kilómetros que separan, aparcar (tarea ardua) y recogerles.
 
Ahora con el buen tiempo, el parque es un hervidero de madres y "cuidadoras". Hace un par de años, me sentía extrano (por aquello de ser el único hombre del parque). Hoy me siento como pez en el agua. Algunas me llaman el "chollo marido".
 
Mientras ellos se desfogan en el parque yo tengo que seguir atendiendo mi trabajo a través del móvil. Y la verdad es que resulta complicado cerrar una reunión mientras tienes que empujar a un niño en el columpio y vigilar con el rabillo del ojo que la mayor no se escape. En fin, una ¿odisea? Después de una tralla considerable llega lo más divertido: convencerles de volver a casa a bañarnos y cenar. ¡Ja, ja, ja!
 
Mientras juegan un rato en su habitación preparo una cena rápida. Rápida no, fulminante. Ya quisieran los de McDonalds ser tan rápidos como un servidor.
 
El baño: ellos no tienen la culpa de que me hayan tenido que operar 3 veces de una hernia discal y lleve la espalda sujeta con tornillería; ni que yo mida 2 metros de alto (ni ellos de ser tan bajitos). De modo que para evitar partirme el espinazo, finalmente optó por hacer un 3x2 y meterme con ellos en la bañera y así minimizar riesgos de contracturas. La lucha viene porque al principio ninguno quiere bañarse y luego resulta que no quieren salir. Como está mandado...he tenido que soportar lloros pero finalmente están limpitos y con el pijama puesto.
 
Llega la hora de la cena, sobre las 8 de la tarde y por la puerta suele llegar el relevo: mi mujer. Cada uno tiene lo que tiene y a ella ya la gustaría poder estar más tiempo en casa para estar con los niños, pero así nos dividimos las tareas.
 
Hoy no he hecho huelga. He ido a trabajar, como ayer, como mañana. Porque del mismo modo que el cuidado de mis hijos es mi obligación, igualmente lo es (sobre todo por los que no lo tienen) acudir a mi trabajo.

viernes, 23 de marzo de 2012

CON EL CULO AL AIRE (TELE 5)

Anonadado me he quedado leyendo en elmundo.es que la presentadora de un programa en Tele5 no contenta con que la metieran mano y la "tocaran las tetas" (textual y literalmente), ha optado por enseñar su culo.
La interfecta en cuestión es Mercedes Milá y el programa ¡cómo no! es Gran Hermano 13. Lo de denominar a algo 12+1 lo dejo para Angel Nieto que en su terreno defendió bien durante muchos años su trabajo. En el caso de Mercedes Milá, y aunque yo sea periodista, ya no sólo denigra la profesión, sino que flaco favor creo yo que hace a su carrera. Además, y por otro lado, la mujer cuando optó por levantarse la falda en un afán por conseguir más audiencia, porque otra explicación no le veo yo, puso de manifiesto la precaria situación económica por la que atraviesan los periodistas ya que como se aprecia no lleva ropa interior: las bragas, vamos.
En fin, un alarde de buen gusto desde el punto de vista informativo. Y yo, en quien pienso es en su hermano. Menos mal que estas tendencias sólo los lleva a cabo la fémina de los Milá porque, ¿alguien se imagina a su hermano presentando el Telediario en calzoncillos, o dando la última hora de su corresponsalía desde Washington mientras eructa?
En la carrera de periodismo, un profesor instaba a las chicas a que no utilizaran sus armas de mujer para lograr un puesto de trabajo y que mostraran todas sus dotes ante el micrófono. Buf, pues visto lo visto...

UNFOLLOW

Gracias a mi anterior post he conseguido que un ex compañero donde hace años coincidimos, y seguidor mío en Twitter y en Linkedin me haya hecho un unfollow. Aunque me imaginaba a qué se refería (por lo del unfollow), quise cerciorarme: me abandona.

Visto su perfill y sus seguidores en twitter imaginé que no le hacía mucha gracia leer post de este calado y, sí, más tirando hacia la derecha que hacia la izquierda. En el post decía en el segundo párrafo que me considero un demócrata. A este ex seguidor, y periodista, me gustaría comentarle que entre mis seguidores tengo no sólo a gente neutra y de derechas, sino también a gente de izquierdas. Si vuelve a ver mi perfil verá que hay hasta algún diputado con el que he podido conversar de manera más que amigable de asuntos políticos, con toda la cordialidad del mundo. Hace poco -incluso- la exmisnistra de la cartera de Vivienda me envío una misiva por el post sobre el cáncer dándome ánimos, a la cual estoy tremendamente agradecido.

Si esperabas en mis post que ensalzara a la izquierda, lamento tener que comunicarte que erraste. Siento, y mucho, que no podáis contar con el diario Público como altavoz de vuestras ideas. Pero también lamento actitudes como la tuya en la que parece que sólo quieres ver el mundo con tu cristal; cuando creo que es más enriquecedor poder ver (y disfrutar) la vida desde el máximo número de ópticas.

jueves, 22 de marzo de 2012

AUTOFINANCIACIÓN

El 29 de marzo iré a trabajar. Como ayer, como todos los días. Quienes van a ir a la huelga es por la reforma laboral. Pero de lo que se tiene que preocupar cada uno es de trabajar. Y hacerlo lo mejor posible. Así, aunque vengan mal dadas, difícil será que estés en el punto de mira.

Como demócrata creo en el derecho a la huelga. Pero también como demócrata creo en el derecho de asociación. No sé qué pasará el 29 de marzo. No sé si la secundará mucha o poca gente, si será una jornada tranquila o tendremos "movidas". Las fuerzas convocantes -CCOO y UGT- al margen de no haber respetado ni siquiera los 100 días que prácticamente todos los presidentes del gobierno han disfrutado, quieren, pretenden hacer pasar por el aro a los españoles que ellos representan los intereses de los trabajadores.
Como trabajador, nunca me han representado (ni ahora en activo ni cuando me despidieron). Ni tan siquiera me siento identificado con ellos. Yo tengo mis propias opiniones sobre ellos y divergen plenamente. Me parecen asociaciones arcaicas en pleno siglo XXI. Posiblemente muy útiles a comienzos del siglo XX, pero no a día de hoy; y o se renuevan o no sé siquiera a qué punto quieren llegar.

Como ellos afirman tener en sus filas a miles de afiliados, espero que el gobierno pronto elimine las ayudas, subvenciones, prevendas y regalos millonarios tanto a los propios partidos políticos como a los sindicatos. Si los "indignados" del 15M gritaban que los partidos políticos no les representaban, entiendo que los sindicatos tampoco. Insisto, espero que el sr. Rajoy tire de tijera y los partidos políticos se autofinancien con las cuotas de sus afiliados. Y que los sindicatos corran -obviamente- con la misma suerte.

Y, ah por cierto, respecto a la reforma laboral: vayamos al "curro" pensando en dar lo mejor de nosotros mismos, no pensando en la hipotética indemnización que me tendrían que aflojar si me despidieran. Que hablamos de trabajar, y aunque sólo sea por respeto a los 5 millones de personas que no pueden disfrutar de este privilegio, hagamoslo lo mejor posible.

martes, 20 de marzo de 2012

¿Y SI ME PONGO DE AUTÓNOMO?

Hace poco leía en la prensa que mientras el número de parados crecía día a día, la cifra que aumenta considerablemente es la de los autónomos. El problema de estos cientos de personas que se lanzan a crear un proyecto es que muchos surgen de la desesperación.
 
En esa cola del INEM ya estuve yo hace 5 años -y volví en otras dos ocasiones  hasta hace año y medio- y, en algún momento, cuando te encuentras que no eres más que un número, piensas en dar ese cambio radical a tu existencia, tirar por la calle de en medio y lanzarte a la aventura de ser empresario. Imagino que el ratio de éxito debe ser ínfimo porque, en caso contrario, millones de personas ya se hubieran decantado por la experiencia. El motivo principal por el que casi todas estas experiencias fracasan se debe, bajo mi parecer, a que surge por una mezcla de sentimientos poco propicios: rabia, prepotencia, ignorancia...desesperación. Y claro, con estos ingredientes, lo más normal es que el proyecto fracase y sólo sirva para liquidar el exiguo capital con el que contábamos.
 
Muchas veces se opta por una línea de continuación e intentamos desarrollar el trabajo en el mismo sector en el que estábamos. La ventaja: podemos conocer más o menos bien dicho sector. La desventaja: una lucha titánica entre David y Goliat (tú eres Goliat) y donde David es tu ex empresa y todas las restantes. Aquí se hace imprescindible que tu nombre suene lo suficiente y tenga cierto prestigio: De lo contrario, será como salir a navegar en el Atlántico con una Zodiac a remos.
 
Otra opción es hacer un examen de la situación y probar con algún negocio que consideres su viabilidad. Deberás ser 100% exigente y ver tanto tus debilidades como fortalezas; vislumbrar las oportunidades que se puedan abrir así como las amenazas que te surgirán, tanto de tu competencia como de tu inexperiencia en un sector/industria novedoso. Como fortaleza, entrarás en un sector donde no arrastrarás vicios. La debilidad se une con las amenazas: la feroz competencia. El que haya leído hasta aquí, le sonará sí o sí la importancia de efectuar un buen análisis DAFO para saber ubicar tu negocio.
 
Luego hay quienes unen sus hobbies con su trabajo. Posiblemente sean las personas más motivadas puesto que van al trabajo como quien va al cine, van a hacer lo que les gusta. Como es obvio, hay sectores industriales donde no se puede materializar muy bien esta premisa. Al que le guste el tema de las finanzas, le resultará un poco difícil montar un banco, por pequeño que sea. Pero le será fácil -quizá- abrir una consultora fiscal/laboral y ofrecer servicios con alto valor añadido, donde podrá competir en precio -sobre todo- en los sectores donde se haya podido especializar previamente.
 
Y el lugar por donde nos enteramos de que Pepito se ha puesto por cuenta propia es en linkedin. Hasta hace poco uno ¿contaba? su experiencia profesional. Ahora, echas un vistazo y verás Owners, CEOs, Founders y Entrepeneurs a patadas. Vamos, que te han despedido y pones Entrepeneur (emprendedor,empresario...lo que pasa es que suena mejor siempre ponerlo en otro idioma. Si es que hasta para esos somos tontos) a ver si así suena la flauta...¿Pero qué flauta?


Lo que hay que hacer es trabajar, tener las ideas muy claras, saber qué queremos hacer y presentar un plan de negocio realista en el corto plazo. Analizar hasta lo más mínimo los pros y los contras. Buscar la financiación necesaria (sin pasarse). Y lanzarse. Y posiblemente darse un batacazo. Eso significa que vas por el buen camino, porque sólo el que se equivoca aprende. Os dejo una cita de Henry Ford muy ilustrativa: "El fracaso es la oportunidad de empezar de nuevo, pero más inteligentemente". Mucha suerte.

viernes, 16 de marzo de 2012

QUE TRABAJE RITA

Con los 5 millones de parados, España se sostiene al límite. Ni brotes verdes, ni azules, ni colorados. Y lo peor de todo es que -lejos de reducirse la cifra- muy probablemente ésta aumente.

Por un lado están los funcionarios. Es un cuerpo que seguramente es necesario pero, como aún pensamos con la mentalidad propia de los años 70 y 80...quién no ha escuchado alguna vez eso de "mi hijo va a opositar para tener trabajo asegurado". La realidad a día de hoy es que tenemos unos ¿trabajadores? que rara vez funcionan (y se llaman funcionarios); que se piensan que por tener la oposición aprobada tienen todos los derechos adquiridos. Gente desmotivada (no todos, a Dios gracias) y que su implicación-motivación con su trabajo estriba casi al 99% en la paga a fin de mes.
Un dato muy curioso es que mientras en EEUU los jóvenes universitarios entre 22 y 24 años, un 80% piensan en ser emprendedores, en España ese mismo porcentaje piensa en ser funcionario (otra vez la burra al trigo) y así, no generamos riqueza.

Por otro lado, tenemos a esos enfermos crónicos que saben que -durante 18 meses- con ir al médico y decir que no se encuentran bien, pueden estar tocándose las narices a costa del contribuyente.

Otros "empleados" -no sé si muy necesarios actualmente- son los miles de militares que desde los 58 años pasan a la reserva activa. Éstos ven reducida su nómina y simplemente se pueden quedar en casa y sólo son llamados en caso de contingencia, o sea, guerra. ¿Ycuándo ha sido la última vez que España se levantó en armas contra otro páis? Pues concretamente hace unos 40 años por el conflicto del Sáhara. Desde entonces, y también a Dios gracias, vivimos en paz plena con todo el mundo.

Luego, de los casi 5 millones de parados, tenemos a un grueso de perfiles que prefieren agotar las prestaciones por desempleo y tomarse su nueva situación laboral como unas "vacaciones pagadas". ¡DONG, error! El que uno se encuentre en el paro (yo lo he estado hasta 3 veces en los últimos 5 años) no significa que tengas que agotar tu prestación. Que, por otro lado, sí que es un derecho puesto que no es más que recoger lo que tú has sembrado durante tus cotizaciones a la Seguridad Social. De lo que se trata es que la gente trabaje aunque gane menos de lo que tenía antes. Claro, imagino que en la poltrona se está de fábula, viendo la vida pasar, los lunes al sol en un bar con un café. Pero la realidad es que el tiempo pasa, y cada día hay más gente en el paro. Y cada vez hay más gente preparada (al menos igual que tú). Y además, cada día que pasa perdemos competitivad propia en nuestro mercado. Hace poco, una amiga que trabaja en Oracle se acogió a un ERE pensando (confiando) que la iban a llamar de la competencia. Pero el caso es que pasó el tiempo y un año después el único que la ha llamado es el INEM para que acuda a sellar el paro.

Muchas veces, por desconocimiento, la gente piensa que si cojo un trabajo donde gano menos que antes, si me despidieran perdería el paro, cuando no es así. Pero, señores, que de lo que se trata es de trabajar, no de pensar en las posibilidades varias en caso de despido. Esto me recuerda en una de las empresas donde trabajé durante 7 años. Se me revolvían las tripas por los comentarios de los más seniors, los cuales sólo pensaban que "como llevo aquí 10 años trabajando me tienen que dar una indemnización millonaria".
Y al final, esa es nuestra gran lacra. Que en vez de trabajar porque creemos que es necesario y por hacer un buen desempeño, muchos sólo trabajan pensando en que ójala me despidan para cobrar mi finiquito millonario.

Y así nos luce el pelo, a este país de chirigota. Lo dicho, que trabaje Rita. Yo, con su permiso, continúo trabajando

martes, 13 de marzo de 2012

LA (AUSENTE) EDUCACIÓN

Como padre, nos hartamos de inculcar a nuestros vástagos unas normas de comportamiento, en algunos casos, mínimas, para que cuando sean mayores sean los suficientemente educados y cordiales con sus semejantes.
 
Muchos de los padres y/o profesores invertimos (que no gastamos) miles de horas al año diciendo a los niños que las cosas se piden por favor, que cuando se entra en una casa hay que saludar (buenos días!), dar besitos y esas cosas y despedirse de la gente, ya sean familiares y/o amigos como desconocidos, con un adiós lo más cordial posible. Pero claro, como adultos, luego nos encontramos con que la educación brilla por su ausencia. Hace un par de semanas inscribí a mis hijos a natación en un polideportivo municipal (espacio público) y me llevé la cámara de fotos para inmortalizar ese momento para su particular álbum de fotos. Les hice sólo un par de fotos a cada uno de ellos y, cuando estaba guardando la cámara, un socorrista me advirtió que no podía hacer fotos. Yo le contesté que sólo le había hecho fotos a mis hijos e insistí en que viera que sólo estaban ellos. Él me creyó a pies juntillas (lo cual agradezco) y nos fuimos cada uno a su lado. El caso es que fui a informarme sobre un campeonato de tenis de mesa y preguntar por la prohibición de hacer fotos. Cuando llegué a la mesa de información una ¿señora? me espetó: ¡No se pueden hacer fotos! Contuve la respiración, la miré a la cara con una sonrisa y me dijo de nuevo: ¡No se pueden hacer fotos! Con una sonrisa y con educación la dije: "Lo primero, buenos días". En menos de 5 segundos la responsable de ¿atender? al público cambió la cara, quizá por venguenza propia.
 
 
Desde el punto de vista profesional, soy el responsable comercial de la aplicación Study2gether. La semana pasada visité a un colegio de la Sagrada Familia en el sur de Madrid y me recibió un docente experto en TIC. Le gustó mucho la aplicación pero me comentó que "lamentándolo mucho ahora no podemos bla bla bla". Bien, cordialidad plena: me recibe, me dice que no puede porque (sus razones) y punto pelota.
Al día sigueinte, haciendo un rastreo de colegios concertados en Google me tope con otro colegio perteneciente a la Sagrada Familia; éste, en la provincia de Guadalajara. Indagé en Internet y cuando di con el nombre del director, hice una búsqueda para escribirle un correo. El director -sacerdote, para más señas- me respondió muy concisamente sin un buenos días y sin un adiós. Sólo me conminó a que no le escribiera más a ese correo porque era personal. Correo personal que él mismo hace público en Internet; si yo quiero que no me bombardeen mi correo privado en Internet,¡no lo publiques, álma cántara!
Eso sí, lo más curioso, chocante e hipócrita de todo es que si visitas la web de su colegio, en el apartado de saludo del director la carta empieza con un "Queridos Amigos" y concluye con un  "Bienvenidos a nuestro colegio", mientras en el cuerpo del texto promulga que hay que educar en valores y en el respeto.

Imagino que es el respeto que este señor se dejó en casa aquel día; y, respecto a los valores, intuyo que se refiere a "sus" valores, y entre los que no se incluye la educación, entendida como tal.

miércoles, 7 de marzo de 2012

USAR Y ¿TIRAR?

Esta tarde los chicos de Apple y mirando al cielo -no por ver si llueve, sino para recordar a su desaparecido Jobs- presentan su último iPad, el tercero.

En dos años aproximádamente, Apple ha sacado al mercado 3 modelos de un mismo producto. Con el teléfono ha hecho tres cuartos de lo mismo. Pero lo peor es que con cada nuevo producto pone de manifiesto que sus productos anteriores no sólo se han quedado desfasados, sino que además de ser trastosde escasa utilidad, son productos que no han sabido "escalar" en el tiempo. No quiero entrar en la polémica de si Android o Apple; para gustos los colores.

Porque no hablamos de un producto que tiene un precio, digamos, asequible. Gastarse cerca de 600 euros en su versión más pro para que el fabricante te "invite" a adquirir una nueva versión en menos de un año me parece poco menos que un despropósito.
De acuerdo que nadie obliga a nadie. Pero como he leído hoy en Internet, muchos de los usuarios de iPad, que han comprado la dichosa tableta movidos por la moda, la usan más que nada para justificarse de su gilipollez y no olvidarla en un cajón de la mesilla de noche.
Tengo conocidos super tecnológicos que han ido comprando PS2, XBox y demás cachivaches que regalan porque lo compraron en momentos de ....¡idiotez!

Hace unos meses me metí en el trastero de mi casa y haciendo limpieza saque, ni más ni menos, 12 teléfonos móviles y 4 PDA de distintas marcas (de los últimos 10 años). Me he quedado con algunos modelos por aquello de la nostalgia y por poder mostráselo a mis hijos.Recordando a Calderón de la Barca, en un fragmento de La Vida es Sueño, dice así: ¿Habrá otro, entre sí decía/ más pobre y triste que yo?;/ y cuando el rostro volvió/ halló la respuesta, viendo/ que otro sabio iba cogiendo/ las hierbas que él arrojó. Y el caso es que saqué todo mi arsenal de tecnología a la calle, lo dejé encima de un contenedor de basura. Media hora después los 3 teléfonos más recientes (el más antiguo tendría unos 5 años) ya no estaban. ¡Se los habían llevado! Y no creo que sea ya porque estemos en crisis (que también), sino porque estamos entrando en una dinámica en la que los fabricantes nos quieren imponer una obsolescencia "programada" de muchos de nuestros artículos en un plazo sumamente corto, demasiado.

lunes, 5 de marzo de 2012

MANCOS Y COJOS, PERO CON EL SEXO QUE QUERAMOS

En esta España de pandereta que nos está tocando a vivir es el más claro ejemplo del mundo al revés. Desde hace unos pocos años, por aquello de ser más "progre", la Seguridad Social cubre desde entonces ciertas intervenciones quirúrgicas que para un ¿amplio? colectivo es fundamental. Me refiero a las operaciones de cambio de sexo.

Al otro lado están los de siempre, los que no hacen otra cosa que pedir, pedir y pedir. Por ejemplo: los diabéticos. El que sufre de diabetes bien sabe que tiene que controlarse regularmente la glucosa en sangre por varios motivos. Aparte de tener más papeletas para irse al otro barrio, se puede quedar ciego (entre otras cosas). Como situación previa, los diabéticos sufren trastornos visuales y muchos de ellos tienen que llevar gafas. El tratamiento es muy sencillo: vas al médico y te dicen que vayas al oculista y que te hagas unas gafas, porque el coste de las lentes y la montura no las cubre la Seguridad Social; pero si estás cansado de tener una pirulilla colgando...oiga usted, sepa que la Seguridad Social le puede convertir en toda una mujer, by the face.

Por otro lado, cuando tienes un dolor de muelas, te caben dos recursos. Tirar de nuestra estimada Seguridad Social (que pagas religiosamente en plan cuotas obligadas mes a mes) y si te duele un premolar o un incisivo, ellos te lo arrancarán de cuajo; con mucho mimo, eso sí. La otra opción es ir a un dentista privado para salvar la pieza, que te hagan un empaste o, en el peor de los casos, una endodoncia (más parné a soltar). Pero recuerda: aún estás a tiempo de tener esos pechos maravillosos que, como hombre, siempre soñaste y poder convertirte de la noche a la mañana en Juana la Loca.

Menos mal que cuando te rompes una pierna o tienes una esguince de tobillo no te sierran el miembro (la extremidad). Porque -y hasta donde yo sé- tan hueso es un diente como un fémur. Lo que aún no sé porque leches si te duele una muela te la quitan y no te la arreglan (tampoco creo que sea muy caro), y si te rompes el brazo (como es lógico) te lo vendan o te lo escayolan. Anda, que si siguieran las mismas metodologías, España sería como un barco pirata: todos cojos con pata de palo y con garfios en los muñones.

AL VAGO, ¡JARABE DE PALO!


Hace unas pocas semanas, en un intento por ahorrar unos cuantos miles de euros al erario público, la presidenta de la Comunidad de Madrid eliminaba el complemento salarial para todos los enfermos que están de baja. Supone un 40% de la nómina y, en realidad, es un buen pellizco. Lo que me deja la duda es si la medida tenía una doble finalidad. Por un lado ahorrar un 40% de las nóminas y, por otro, animar a los que estaban viviendo de la sopa boba a volver al "tajo". Bueno, pues parece ser que al día siguiente de emitirse esta norma, más de 2.400 funcionarios han vuelto a su puesto de trabajo. ¡Qué narices!

Lo que nos hace pensar varias cosas: que no hay mejor medicina que reducirte el sueldo; que en España vive una gran cantidad de vagos y que han estado chuleando las prestaciones por baja desde hace años. Que, por desgracia, pagarán justos por pecadores lo cual indica el nefasto o nulo grado de solidaridad e implicación en sus trabajos entre ellos mismos.

Por otro lado, podríamos pensar que la mejor inversión en I+D en el campo de la medicina es eliminar dicho complemento salarial. Me imagino la estampa: más de uno sentado en la terraza del bar de turno, al sol, muy malito él y -al día siguiente- ir corriendo al trabajo a fichar (poderoso caballero Don Dinero).

Poco antes de las elecciones generales del 20N, la señora Aguirre afirmaba que "la fiesta se había acabado". De modo que sería muy lógico abrir un expediente sancionador a toda esta caterva de vagos que han estado aprovechándose de una prevenda pública, pagada por todos; porque han estado mintiendo descaradamente (ellos mismos son la prueba fehaciente que mentían cuando decían que estaban pochos).

Seguramente, y por desgracia, habrá muchos funcionarios que estén enfermos de verdad, luchando contra una "larga enfermedad". De modo que si se invirtiera en seguimientos de cada uno de los pacientes, los que de verdad están enfermos podrían cobrar el 100% de su nómina. Y, por supuesto, los que han estafado, ¡a la calle!

jueves, 1 de marzo de 2012

Y TÚ, ¿DE QUÉ QUIERES MORIR?

Hace algo más de 10 años dijo Mariano Barbacid, uno de nuestros más reputados oncólogos en el mundo, que la meta en el corto plazo es lograr que la gente se pueda morir con cáncer, y no de cáncer. La diferencia entre las dos preposiciones es abismal. La primera indica que podremos morirnos de viejos (o de lo que sea) y conviviremos con el cáncer, como hasta ahora con otras enfermedades como la diabetes. En la segunda acepción se hace referencia a las personas que morirán  por culpa del cáncer, de esa "larga enfermedad".


Recientemente he leído en un medio especializado en medicina que el cáncer tiene una carga genética en un 10% como máximo. El resto es una especie de respuesta a "eres lo que comes". Yo además lo ampliaría a "dónde vivas y cómo vivas". Es decir, el entorno en el que vivas será crucial para desarrollar un cáncer. Se está demostrando que vivir en las grandes ciudades con una contaminación tanto acústica como del aire atroz, con un estrés disparado y con una alimentación más propia de los animales del zoo que de humanos, predispone a las personas a desarrollar determinados tipos de cáncer. De hecho, más del 40% de los cánceres son fácilmente evitables siguiendo hábitos saludables. Pero aún así, la sociedad manda...hasta que deja de hacerlo

"No te preguntes por qué te ha tocado", me dijo mi querido oncólogo hace 9 años cuandos me dio la noticia. Te ha tocado a ti y no hay que hacerse más preguntas. Pero claro, como supuestamente somos seres racionales, intentas dar una explicación a tu nuevo estado de vida; quizás las copas de fin de semana, haber fumado, levantarse temprano para ir a trabajar todo el día; excesos de la vida, defectos en la vida...

Sobre lo que sí me hacía la pregunta era por qué familiares en Galicia, en Lugo, morían con más de 90 años asidos a su cigarrillo de tabaco negro y su vaso de orujo, haciendo ricas dietas en grasas...Por qué yo con 29 años, deportista, tomando todo descafeinado, light, leche desnatada y descremada y cuidándome de tomar todo Sin tuve que reproducir un cáncer. Ah, se me olvidaba... Como contrapunto vivía en una ciudad llamada Madrid donde, cuando no llueve, una capa gris de contaminación envuelve como una boina a todos los que allí vivimos y trabajamos, obligándonos a respirar aire contaminado

De modo que, a simple vista, parece ser más rentable irse a vivir al campo, dejar la ciudad que nos mata y tirar de tecnología para teletrabajar y dejarse de zarandajas. Que la vida son dos días, y hay que aprovecharla intensamente.