Hace algo más de dos años que inicié este blog. Por aquel momento, trabajaba en una empresa de cuyo nombre sí me acuerdo, pero ya no existe, fagocitada por la crisis.Así, desde octubre de 2012 decidí poner en valor mi experiencia, mi potencial y mis contactos; y este blog creció exponencialmente con una mayor cantidad de post.
Sin embargo, al final convertí Complicaciones las Justas en un Blog con un contenido diverso, muy diverso; excesivamente variado, donde he tratado temas personales, íntimos, relacionados con mi negocio, etc.
Hace apenas dos meses cambiamos la seca localidad de Las Rozas (aunque me consta que ahora llueve) por el vergel de Vigo (desde enero hasta el día de hoy ha llovido TODOS los días, menos 4) por motivos personales.
Gracias a unos contactos bien seleccionados he conseguido introducirme en el tejido empresarial gallego. Por eso, he tomado la decisión de desdoblar mis contenidos editoriales en dos blogs. Para lo humano y lo divino, quienes quieran seguir al tanto de mis andanzas y desventuras en estas tierras, anecdotarios y demás, tenéis este blog. Y para hablar de comunicación, de nuevos proyectos y de "empresa", os dejo mi nuevo blog, quizás más profesional.
Por eso este post no lo he titulado con un Adiós, sino con un Hasta luego, un hasta pronto. Intentaré escribir con la asiduidad que me permita mi familia (lo primero) y mis clientes (lo siguiente); que, por cierto, aprovecho para comentaros que esta semana ha sido especialmente fructífera.
Lo dicho, espero que podáis seguir leyéndome y yo poder contar historias interesantes. Recibid un cordial saludo.
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