viernes, 16 de marzo de 2012

QUE TRABAJE RITA

Con los 5 millones de parados, España se sostiene al límite. Ni brotes verdes, ni azules, ni colorados. Y lo peor de todo es que -lejos de reducirse la cifra- muy probablemente ésta aumente.

Por un lado están los funcionarios. Es un cuerpo que seguramente es necesario pero, como aún pensamos con la mentalidad propia de los años 70 y 80...quién no ha escuchado alguna vez eso de "mi hijo va a opositar para tener trabajo asegurado". La realidad a día de hoy es que tenemos unos ¿trabajadores? que rara vez funcionan (y se llaman funcionarios); que se piensan que por tener la oposición aprobada tienen todos los derechos adquiridos. Gente desmotivada (no todos, a Dios gracias) y que su implicación-motivación con su trabajo estriba casi al 99% en la paga a fin de mes.
Un dato muy curioso es que mientras en EEUU los jóvenes universitarios entre 22 y 24 años, un 80% piensan en ser emprendedores, en España ese mismo porcentaje piensa en ser funcionario (otra vez la burra al trigo) y así, no generamos riqueza.

Por otro lado, tenemos a esos enfermos crónicos que saben que -durante 18 meses- con ir al médico y decir que no se encuentran bien, pueden estar tocándose las narices a costa del contribuyente.

Otros "empleados" -no sé si muy necesarios actualmente- son los miles de militares que desde los 58 años pasan a la reserva activa. Éstos ven reducida su nómina y simplemente se pueden quedar en casa y sólo son llamados en caso de contingencia, o sea, guerra. ¿Ycuándo ha sido la última vez que España se levantó en armas contra otro páis? Pues concretamente hace unos 40 años por el conflicto del Sáhara. Desde entonces, y también a Dios gracias, vivimos en paz plena con todo el mundo.

Luego, de los casi 5 millones de parados, tenemos a un grueso de perfiles que prefieren agotar las prestaciones por desempleo y tomarse su nueva situación laboral como unas "vacaciones pagadas". ¡DONG, error! El que uno se encuentre en el paro (yo lo he estado hasta 3 veces en los últimos 5 años) no significa que tengas que agotar tu prestación. Que, por otro lado, sí que es un derecho puesto que no es más que recoger lo que tú has sembrado durante tus cotizaciones a la Seguridad Social. De lo que se trata es que la gente trabaje aunque gane menos de lo que tenía antes. Claro, imagino que en la poltrona se está de fábula, viendo la vida pasar, los lunes al sol en un bar con un café. Pero la realidad es que el tiempo pasa, y cada día hay más gente en el paro. Y cada vez hay más gente preparada (al menos igual que tú). Y además, cada día que pasa perdemos competitivad propia en nuestro mercado. Hace poco, una amiga que trabaja en Oracle se acogió a un ERE pensando (confiando) que la iban a llamar de la competencia. Pero el caso es que pasó el tiempo y un año después el único que la ha llamado es el INEM para que acuda a sellar el paro.

Muchas veces, por desconocimiento, la gente piensa que si cojo un trabajo donde gano menos que antes, si me despidieran perdería el paro, cuando no es así. Pero, señores, que de lo que se trata es de trabajar, no de pensar en las posibilidades varias en caso de despido. Esto me recuerda en una de las empresas donde trabajé durante 7 años. Se me revolvían las tripas por los comentarios de los más seniors, los cuales sólo pensaban que "como llevo aquí 10 años trabajando me tienen que dar una indemnización millonaria".
Y al final, esa es nuestra gran lacra. Que en vez de trabajar porque creemos que es necesario y por hacer un buen desempeño, muchos sólo trabajan pensando en que ójala me despidan para cobrar mi finiquito millonario.

Y así nos luce el pelo, a este país de chirigota. Lo dicho, que trabaje Rita. Yo, con su permiso, continúo trabajando

2 comentarios:

  1. Pues si, buena reflexión y muy de acuerdo con todo lo plasmado. Es una pena que en la realidad de nuestro día a día se cumpla el dicho "pagan justos por pecadores" y por la mentalidad y conducta de algunos nos vamos hundiendo el resto del barco.

    Saludos :o)

    ResponderEliminar
  2. Menos mal que no generalizas, estoy de acuerdo contigo en la mayoria de lo que dices. Te cuento mis sensanciones: la envidia es un deporte nacional que afecta al poco emprededor que hay. Si tienes una idea, una iniciativa, una ilusión, el primer corte que tienes que pasar es la envidia que genera; normalmente al que intenta sobresalir se le cercena de golpe mediante la mediocridad de los que lo tienen fácil. El segundo corte es la propia administración y el sistema financiero. España no está preparada para facilitar la vida a los emprendedores. Yo conozco muchos emprendedores que han desisitido y se han marchado.

    Al pais de chirigota que tu comentas habría que añadirle el "modelo económico" de la corrupción, que por lo visto no tiene el castigo que se merece y el que deseamos todos los españoles que se produzca. Dinero público saqueado, que más da, para eso estamos los que cumplimos con nuestras obligaciones tributarias y de cotización. No hablemos de la cultura televisiva impregnada de programas sucios e impropios y que provocan discordia, insultos y lo más importante: la falta de respeto.

    Se han perdido los valores. España no tiene credito, quiero decir que no inspira confianza. Habría que volver a empezar de cero.

    ResponderEliminar